Sun & Sea: una reflexión poética sobre la crisis climática y la desconexión actual

Del 21 al 24 de marzo, el Teatro Colón de Bogotá se convertirá en una playa, donde la serenidad del escenario contrasta con la urgencia de su mensaje. SUN & SEA, la innovadora Ópera-Performance que recibió el León de Oro en la Bienal de Venecia, llega a Colombia para incitar al público a una profunda meditación sobre la crisis climática y la sociedad actual. Para llevar a cabo esta transformación, se requerirán 20 toneladas de arena, creando un entorno inmersivo que sumerge al espectador en la experiencia.

Creada por Rugilė Barzdžiukaitė (dirección), Vaiva Grainytė (dramaturgia) y Lina Lapelytė (composición), tres artistas lituanas reconocidas por su trabajo interdisciplinario, esta obra nos transporta a una playa artificial donde un grupo de turistas disfruta del sol y el descanso. A través de sus diálogos y melodías, se manifiestan preocupaciones ambientales, contradicciones sociales y una sensación de desconexión con la realidad.

En el escenario participarán más de 50 personas, incluidos más de 20 artistas lituanos que llegarán a Bogotá para esta presentación y aproximadamente 25 integrantes del Coro Nacional de Colombia. Aunque SUN & SEA surge de una perspectiva global, su mensaje resuena con especial intensidad en Colombia, un país donde la riqueza natural enfrenta constantemente los desafíos del turismo desmedido, el extractivismo y las desigualdades sociales.

La costa caribeña y el Pacífico han sido testigos de cómo el crecimiento del turismo no siempre se traduce en un desarrollo sostenible, sino que muchas veces ha llevado a la sobreexplotación de ecosistemas frágiles. En este contexto, SUN & SEA invita a reflexionar sobre el verdadero costo del descanso y el placer, y sobre cómo nuestras decisiones cotidianas impactan la transformación del entorno.

Además, la presentación llega a Bogotá en un momento en que el diálogo sobre el agua se ha vuelto esencial. Con la ciudad lidiando con una crisis de racionamiento de agua debido a la reducción en los niveles de sus embalses, el consumo excesivo y los efectos del cambio climático, SUN & SEA adquiere un significado aún más relevante. La representación de una playa artificial en el corazón de la capital no solo actúa como un impacto visual poderoso, sino que también sirve como un recordatorio de la vulnerabilidad de nuestros recursos naturales y la urgencia de adoptar un uso responsable del agua.

Rugilė Barzdžiukaitė comentó que la intención de la obra no es moralizar, sino provocar cuestionamientos: «transformamos percepciones a través del arte porque, a diferencia de los discursos políticos o mediáticos, el lenguaje artístico permite abordar el problema de una manera sensorial y emocional». Desde esta óptica, SUN & SEA no solo denuncia la crisis climática, sino que también nos invita a reconsiderar cómo vivimos, consumimos y nos relacionamos con el entorno.

Esta Ópera-Performance, que ha tenido lugar en algunos de los escenarios culturales más relevantes a nivel mundial, también explora cuestiones como la desconexión actual, la separación de la naturaleza y cómo la modernidad ha influido en nuestras prioridades. Cada jornada ofrecerá cuatro funciones diarias con 243 espectadores, lo que permitirá que más de 4.000 personas vivan una propuesta artística vanguardista que, por medio de la música y la teatralidad, nos confronta con una de las problemáticas más apremiantes de nuestra era.