Madres en MINISO: Un Homenaje a la Fuerza de las Heroínas Cotidianas
En nuestro universo de la cultura geek, a menudo celebramos los superpoderes más obvios: la velocidad, la fuerza o la capacidad de volar. Sin embargo, en la vida real, hay una clase de héroes cuyos superpoderes son mucho más sutiles, pero igualmente asombrosos. Hablamos de las madres. Esa fuerza indescriptible que les permite ser mamás, profesionales y cabezas de hogar, todo a la vez. Es la energía inagotable que, con amor, parece sanar cualquier herida. Es esa capacidad de convertir una comida simple en un manjar, y la motivación inquebrantable que las impulsa a buscar un futuro mejor para sus hijos. Esa tenacidad, esa capacidad silenciosa, define a una madre.
Este 2025, MINISO celebra siete años acompañando los momentos más especiales para los colombianos, y el Día de la Madre no podía ser una excepción. Pero esta vez, la marca ha querido ir más allá de los descuentos, para visibilizar las historias de su propio equipo humano. De esos colaboradores, a quienes cariñosamente llaman «Minisers», muchas son madres. MINISO se ha propuesto construir, a través de sus propios relatos, una visión auténtica de lo que significa ser madres para ellas y cómo esta experiencia se entrelaza con sus roles de liderazgo en la compañía.
Historias de Equilibrio y Superación: Las MinisoMoms
«Ser mamá y ser Miniser no son dos cosas separadas; son partes de una misma historia de amor, entrega y crecimiento», comparte Anyi Katherine Aguazaco, Supervisora de la tienda Miniso en el Centro Comercial Santa Fé. Esta dualidad, aunque compleja, revela una capacidad de adaptación realmente notable.
Ángela María Rivera Marulanda, Gerente de la tienda Miniso en Mall Plaza Manizales, conoce bien este reto. «Desempeñar tantos roles en mi vida no ha sido fácil, pero tampoco imposible. Ser mamá, Miniser, mujer y, además, estudiante, puede parecer una misión imposible. Sin embargo, no lo es. Las mujeres tenemos una gran capacidad para hacer tantas cosas al mismo tiempo que, a veces, hasta nos sorprendemos nosotras mismas. Y sí, no es fácil, pero es un reto que enfrento a diario, tanto como madre como Miniser». Sus palabras reflejan una resiliencia que muchos reconocerán.
Los relatos de estas mujeres giran en torno al desafío de ser madres y profesionales, pero también a los «superpoderes» que han cultivado: la capacidad de hacerlo todo, dispuestas a todo. Es gratificante ver cómo emergen nuevos liderazgos femeninos, donde la empatía se convierte en una fuerza clave para construir entornos laborales más humanos y colaborativos.
Gisela Gil Buitrago, Gerente de la tienda Miniso en el Centro Comercial Fundadores, encuentra inspiración incluso en el fútbol. «A mis hijos, Juan Martín y Emmanuel, les gusta mucho el deporte. Uno de ellos juega al fútbol, y acompañarlos en sus partidos me ha dejado muchas enseñanzas para mi equipo de trabajo. Ver cómo juegan en equipo y se apoyan mutuamente, ganen o pierdan, me ha brindado valiosas ideas de liderazgo para mi tienda. Un pequeño grupo de niños, con su trabajo en equipo, nos da el ejemplo de lo que significa liderar con empatía». Es una lección de liderazgo que nace en lo cotidiano.
«Ser mamá y trabajar es un equilibrio que a veces parece imposible», nos confiesa Viviana Cabezas, Gerente de la tienda Miniso en el Centro Comercial Paseo Villa del Rio. Pero cuando ambos caminos se cruzan de una manera especial, la felicidad es profunda. Su hija, Paula Alejandra, de 7 años, ha crecido con la marca. «Recuerdo que la primera vez que entró a una tienda se enamoró de un peluche que aún conserva y ama con todo su corazón. Es una ovejita que se llama Bertha. Desde entonces, ha formado una colección completa de peluches». Es una conexión conmovedora con un producto que a muchos de nosotros, en la cultura geek, nos evoca esa alegría de coleccionar.
Andrea Mancera, Gerente de la tienda Miniso en el Centro Comercial Ecoplaza, comparte una historia de transformación personal. «Hace casi seis años, cuando ingresé a la empresa, no era mamá. Sin embargo, Dios me dio la dicha de serlo en este tiempo. Viví una mezcla de sentimientos encontrados: miedo y felicidad por el gran reto que la maternidad me presentó. Lo enfrenté con lo único que tenía en ese momento: mi trabajo». Para Andrea, su empleo estable y bien remunerado en MINISO la ha convertido en una mujer más segura, independiente y realizada, algo que se refleja en su forma de cuidar y educar a su hija. «El equilibrio entre mi vida laboral y familiar me ha enseñado que todo es posible: organizar mis tiempos, valorar cada momento con mi hija y darle un ejemplo de esfuerzo y responsabilidad. Gracias al apoyo y al buen ambiente que encuentro en mi trabajo, he aprendido a ser una mamá presente y una profesional comprometida. Este equilibrio me da confianza, seguridad, alegría y motivación, y me ha permitido tener la certeza de que, a pesar de ser mamá sola a cargo de mi hija, todo es posible».
El Éxito Más Allá de las Cifras
Considerar el éxito de una marca no debería limitarse únicamente a sus estadísticas de ventas o crecimiento en el mercado. Ese tipo de éxito, el que perdura y resuena, debe ir acompañado de algo que no siempre está a simple vista: las relaciones que se construyen a nivel interno y el bienestar de quienes la hacen posible. Cuando una marca representa un apoyo real para sus colaboradores, entonces estamos hablando de un éxito que trasciende las cifras.
MINISO reitera su compromiso de seguir fomentando entornos laborales saludables que promuevan el crecimiento de todos sus «Minisers». Angie Carolina Hernández Preciado, Gerente de Recurso Humanos de Miniso, lo expresa con claridad: «A nuestras Minisomoms queremos darles las gracias por escogernos como el medio para cumplir sus sueños y metas, no solo personales, sino también familiares. Nos llena de orgullo tenerlas en nuestros equipos: liderando, guiando, compartiendo sus ideas y experiencias, y siendo ejemplo para muchos de que #NadaEsImposible».
Este Día de la Madre, el homenaje se extiende a todas esas mujeres que lo dan todo. A las que son mamás y jefas de hogar, y también a las que, desde otros lugares, cuidan, protegen, enseñan y transforman vidas. Son nuestras verdaderas heroínas cotidianas, ¡con superpoderes que quizás el cine envidiaría!
